ayudas y revisión PAC

Casto López Cañibano, Veterinario, Jefe de Ayudas Ganaderas, Servicio Territorial de Agricultura y Ganadería de Zamora

                                        Ayudas y revisión PAC

Casto explicó el abanico de herramientas de ayuda existentes en la actualidad para la ganadería según las distintas especies y variantes como extensificación, ecología, razas autóctonas. Unas compatibles entre sí y otras no. Unas desacopladas, otras dependientes del censo y otras en concurso de adjudicación.

Las ayudas preocupan mucho cuando los costes no alcanzan competitividad suficiente o en los mercados se producen abusos de posición negociadora de la industria o la gran distribución. Así Casto recibió multitud de preguntas de los alumnos.

La revisión de la PAC plantea gran incertidumbre pues todavía faltan muchas negociaciones, pero todo apunta hacia la importancia de la componente ambiental en el pago final de la ayuda, que por el momento se está estimando en un tercio del total. Sin conocer cómo se puede materializar el cómputo de este apartado lo que sí está claro es que algo tiene que haber de positivio para los sistemas extensivos, con menores cargas ganaderas, en zonas desfavorables, que cumplan buenas prácticas ganaderas, exploten razas autóctonas y o se certifiquen en ecológico. La falta de operadores en ecológico hace temer a las Administraciones que si pesa mucho no van a poder ayudar a nadie, pero desde luego el que se encuentre en conversión o certificado debería andar a la cabeza de los derechos.

Por otra parte, la orientación de una explotación por unas ayudas es muy peligrosa porque estas pueden desaparecer cualquier día o se puede perder la condición de beneficiario. La condicionalidad son las exigencias que la sociedad plantea a los productores y cada día son mayores sin que los mercados respondan en consonancia. Es fundamenal en las explotaciones la existencia de recursos propios y la adaptación de las infraestructuras para afinar progresivamente la rentabilidad de la cabaña explotada.

Curiosamente faltaría otra ayuda especial para soportar la penosidad que supone la convivencia con fauna salvaje, tanto depredadores como el lobo, como oportunistas como ciervos y jabalíes, con independencia de las medidas de control de poblaciones y o restituciones patrimoniales en caso de daños.

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